Usagi Yojimbo, de Stan Sakai
Complicada la labor de la crítica que hoy afrento. Por un lado tenemos al personaje en si, del cual se puede hacer una visión global y luego que cada uno decida si adquirir algún tomo suyo o no. Por otra parte la tentación de veintidos tomos en castellano y veinticuatro en inglés, que me proporcionarían el descanso de críticas durante cinco o seis meses… La tentación es grande. Pero no hay más remedio que condensar, como las goticas que le han salido en el exterior al vasito de karkadé que me acompaña junto al teclado.
Corría el año 1984 cuando al señor Stan Sakai se le pasó por la imaginación un universo de personajes consistentes en animales atropomorfizados y ambientado en el Japón medieval. Según Sakai, los kami (dioses) son quienes hacen nacer a cada persona de manera diferente, pero siendo todos dignos del mismo respeto. Gatos, perros, rinocerontes, conejos, cerdos, zorros, murciélagos o serpientes, entre muchos otros, son personajes habituales en cada pueblo. Y entre todos ellos destaca un conejo: Usagi, porque al fin y al cabo alguien tenía que ser el prota de la serie.
Pues resulta que el amigo Miyamoto Usagi, conejo de largas orejas, decide tras la muerte de su señor emprender un viaje de autoaprendizaje como ronin. No, no hablamos de la serie limitada de Miller. Suponía que sabiáis de sobra que un ronin, que es literalmente hombre errante como una ola en el mar, es un samurai sin señor. Puede carecer de amo porque le haya ofendido por algo o a su amo se le crucen los cables y le retira su favor, o como en el caso de Usagi, que su amo la palme. Como curiosidad para el público, que sepáis que el personaje de Usagi está basado en el famoso ronin Miyamoto Mushashi, autor del tratado de artes marciales conocido como El libro de los cinco anillos (tenía un chiste preparado por lo del número en el título y que la última palabra podía ser utilizada como diminutivo, pero he decidido dejarlo estar).
La cuestión es que durante el viaje de peregrinación el conejo conoce a multitud de personajes: Gennosuke, el cazador de recompensas; Tomoe Ame, la guardiana de confianza del señor Noriyuki (a quien Usagi ha prestado servicio en más de una ocasión); Zato-Ino, el espachadín ciego (clara referencia a Zatoichi); Sanshobo, el samurái retirado a una vida de celibato; Kenichi, amigo de la infancia y rival en el amor y su hijo Jotaro… Usagi recorre los caminos de su tierra, prestando siempre su ayuda a los indefensos, y viéndose envuelto en multitud de intrigas políticas y sucesos sobrenaturales, siempre en busca de la paz interior. Además nos ofrece de vez en cuando retales de su juventud, cuando aprendía la senda del samurai.
Si os caen en gracia el tema de samuraises, ninjas, ronines, honor y tradiciones japonienses y demás, no dejéis de darle una oportunidad a la serie. Puede que al principio caigais en el error de pensar que se trata de un producto infantil por los dibujines, pero os aseguro que estariáis totalmente equivocados. La verdad es que, así en plan general y sin entrar en detalles de ninguna de las tramas, me parece que ya os he contado bastante sobre la serie.
Quizá sólo faltaría añadir una cosa: Durante estos meses de reseñas (y por las tontunas de otro blog) creo que igual ya os podéis hacer una idea de mis gustos y opiniones como para saber cuál es vuestro grado de afinidad con ellos, y si os sirve ésto de algo os comento que en casa tengo todos y cada uno de los tomos. Y por eso precisamente la alta valoración. ¿O pensáis que si le hubiese puesto un seis tendría en casa la enooooorme cantidad de papel que suponen todos los tomos?
Y si mi opinión no os merece la pena, que sepáis que cada vez que un tomo de Planeta entra en casa yo nunca lo leo nada más llegar. Ese privilegio lo tiene mi mujer. Y después de que ella me lo deja comienza un peregrinaje por casa de mi hermano (dos lecturas más), su cuñada (otras tres), y vuelve a mi hogar. Luego pasa por dos sobrinos míos y ya descansa definitivamente en la estantería. Que digo yo que alguno de ellos se podría gastar los leuros en comprarse el tomo en lugar de gorronearme todos…

Guión y dibujo: Stan Sakai
Editorial: Planeta DeAgostini
Formato: 20 Libros Rústica. 128-224 Páginas
Precio: 7.78-11.95€