The Legion # 4-5, de Abnett, Lanning y Coipel

Portadas The Legion 4 y 5Bajo el gobierno de Ra’s Al Ghul, el mundo ha cambiado. Nadie se ha dado cuenta de lo serio que es el cambio, después de todo, la gente aún piensa que su presidente es Leland McCauley. Y ahora, enmascarado como McCauley, la Cabeza del Demonio y antiguo enemigo de Batman está determinado a terraformar la Luna. La sopresa es, supongo, tan grande como la experimentada por los lectores en los 80s, cuando se reveló que Darkseid era el villano de la Gran Saga de la Oscuridad; así que tiene perfecto sentido elegir otro inmortal para llevarlo al siglo XXXI.

Como presidente, Ra’s Al Ghul ha violado la ley y ha pisoteado los derechos de todos los seres. Con un propósito siniestro, ha apoyado la experimentación ilegal con el ex legionario Gates y con otras especies de distintos planetas. Declarado como caído en batalla y torturado por un año entero, Gates es finalmente rescatado por Brainiac 5 y un pequeño grupo de legionarios. “Siempre supe que el sistema apestaba… pero no tenía idea de que fuera tan podrido y corrupto”, se queja Gates. “A ese monstruo le ha tomado un sólo año convertir a los Planetas Unidos en un régimen autoritario que no responde ante nadie”, explica Triad.

En “Luna elevada” (The Legion # 4, marzo de 2002), Dan Abnett y Andy Lanning se sumergen profundamente en los horrores de una dictadura disfrazada de democracia. Ellos son lo suficientemente audaces para incluir a un legionario como una de las víctimas. Creo que tiene sentido ver a hombres y mujeres siendo corrompidos tan fácilmente. Y también es interesante observar que la Legión de Súper-Héroes, esa luz de la esperanza, ya no existe. Han sido desbandados, incluso prohibidos por el gobierno de la Tierra. Algunos han regresado a sus mundos, otros están perdidos en galaxias distantes. Al subrayar lo necesaria que es la Legión, los escritores también tienen la oportunidad de demostrar lo grande que es el universo, y lo distantes que están los legionarios entre sí.

Mientras el Mundo Legión es atacado por una flota del gobierno, Xs y Star Boy están atrapados en Xanthu, cara a cara con la amenaza creciente de Robótica y M’Onel es cruelmente herido por Ra’s Al Ghul, quien lo ha debilitado al punto que las balas pueden hacerle daño. Pero tal vez lo más interesante sucede en la galaxia Kwai, donde Saturn Girl y otros legionarios están buscando a la Matriarca, la líder de la raza errante de Shikari.

“Credo” (The Legion # 5) es una extraordinaria aventura autoconclusiva, que se enfoca en las experiencias de Saturn Girl, Invisible Kid, Wildfire y Spark. Ellos han regresado al devastado sistema solar que alguna vez albergó al Progenitor. Y lo que encuentran allí es bastante impactante. Incontables especies alienígenas viajan en sus naves, buscando mundos en los que instalarse, en algunos sólo quedan algunos miles después de la exterminación causada por el Progenitor.

Abnett y Lanning señalan de inmediato el contraste entre Saturn Girl e Invisible Kid: ella aún está furiosa con la Progenie por su pasado genocida, pero él está dispuesto a darles el beneficio de la duda. Ahora que el Progenitor ya no existe, la Progenie está bajo ataque. Sufriendo el mismo destino que otras especies, la Progenie ya no es la cazadora sino la cazada. Un culto interplanetario conocido como Credo está persiguiendo a la Progenie. El líder de semejante culto no es otro que Singularidad, la criatura superhumana que estaba a cargo de proteger una ciudad fantasma en un planeta que había estado muerto por eones.

Saturn Girl pronto entiende que puede retener su dignidad a través del otro: no importa si durante la saga de la Legión Perdida ella y sus camaradas fueron reducidos a la cruel lucha por la supervivencia, la Progenie aun así debe ser tratada con dignidad porque esa es la única manera en la que ella puede mantener un mínimo vínculo con la humanidad. Paradójicamente, la Progenie ha olvidado luchar por su supervivencia, y está siendo exterminada por Singularidad y su Credo. Incluso los pacíficos Kwai ahora están listos para unirse a las filas del Credo.

En sólo un puñado de páginas, Abnett y Lanning examinan el concepto del genocidio, los roles de las víctimas y los victimarios y la noción de que la dignidad y el respeto hacia otras especies deben ser siempre parte de los valores de la Legión. “Credo” también cuenta con Peter Snejbjerg como artista invitado, y sus páginas son asombrosas. Con escenarios sombríos y trazos gruesos, Snejbjerg crea una atmósfera opresiva que refleja las miserables condiciones de vida de la Progenie.