Freshmen # 1-3, de Hugh Sterbakov y Leonard Kirk

Detalle portada Freshmen

Portada Freshmen 01Hace más de 10 años, recuerdo haber leído un artículo en línea sobre Freshmen, una miniserie Top Cow / Image descrita sucintamente como “Las aventuras de estudiantes universitarios de primer año con poderes extraordinarios”. Por supuesto, incluso bajo esta descripción bastante genérica, supe de inmediato que el escritor Hugh Sterbakov junto con el cocreador Seth Green habían inventado algo especial.

Bueno, me llevó más de una década, pero finalmente pude leer los primeros números de Freshmen, y quedé encantado. La premisa básica, como explica Sterbakov, es que “la explosión de una máquina especial ha dado superpoderes a un grupo de estudiantes universitarios de primer año, y los poderes se basan en lo que sea que estuvieran pensando en ese momento”.

¿En qué estaría pensando normalmente un estudiante de primer año en medio de la noche? Muchas cosas. Y es la variedad, la aleatoriedad y también la naturalidad de estos pensamientos lo que Sterbakov logra transmitir con facilidad y buen pulso narrativo. Antes de la explosión, todos los personajes principales han asistido a una fiesta en una fraternidad. “Así que un chico pueda eructarle a cualquiera y emborracharlo, una chica puede hacer que todos se enamoren de ella, otro chico es totalmente pegajoso, ese tipo puede hablar con las plantas, esta chica puede meterse en la mente de las personas… y están (más o menos) dirigidos por un friki del cómic que no obtuvo ningún poder y un castor parlante obsesionado con construir represas”.

Portada Freshmen 02Además de esta loca selección de poder, Sterbakov crea personajes únicos y muy memorables. Por ejemplo, el estudiante estrella de la escuela secundaria que se emborrachó en la fiesta y terminó vomitando había jurado nunca volver a beber (como hacen todos los muchachos cuando están realmente borrachos), y sin embargo, sus poderes recién adquiridos se basan en el alcohol y ahora está en perpetuo estado de resaca. Por supuesto, algunos tienen poderes más útiles que otros, por ejemplo, está el muchacho que fue humillado en la fiesta, desnudado y ridiculizado debido al tamaño modesto de su pene, en el momento de la explosión se desabrochó los pantalones y estaba midiendo su pene, sintiéndose insatisfecho con su tamaño: su poder será tener una polla extremadamente larga. El vegano en el grupo gana el poder de comunicarse con las plantas, lo que al final le impedirá comer incluso una ensalada, ya que puede escuchar a cada planta hablar con él y quejarse de las cosas. No pude dejar de reírme de la ironía de que un vegano lamentara incluso la posibilidad de comer una manzana (ya que la manzana le grita “por favor, no me comas”). ¿Y qué hay de la pareja que tuvo relaciones sexuales y ahora deben tocarse para usar sus poderes incluso si están peleando constantemente?

Portada Freshmen 03Y uno de mis favoritos es Norrin (que se nombra así gracias a Silver Surfer). Él lee cómics todo el tiempo y ya que salió del edificio para comprar pizza, es el único en el grupo que no obtuvo superpoderes, por lo que se convierte en una especie de Robin, con un cinturón lleno de artilugios y una capa. Por supuesto, a pesar de que Norrin insiste en que todos deben obtener nombres clave, usar disfraces y ocultar sus identidades secretas, no son un grupo de superhéroes. Todavía son estudiantes irresponsables, incluso si tienen habilidades extraordinarias.

Es sorprendente ver cuánto desarrollo de personajes puede incluir Sterbakov en sólo 3 números, supongo que su experiencia escribiendo Robot Chicken para Cartoon Network lo ayudó a convertirse en un escritor más eficiente. Leonard Kirk es el artista ideal para este proyecto. Con considerable experiencia en cómics de superhéroes, Kirk sabe cómo hacer que los personajes sean identificables y cómo darles diferentes rasgos físicos al tiempo que recuerda que todos son adolescentes. Los lápices de Kirk están estupendamente entintados por Andrew Pepoy. Los artistas de las portadas son increíbles, Joseph Michael Linsner para el número 1 y Rodolfo Migliari para los números 2 y 3, como Sterbakov explica: “A Rodolfo realmente le gustan nuestros muchachos o simplemente es tan talentoso, pero siempre captura sus emociones y los hace ver de su edad, y lo amo por eso”. De hecho, Migliari es un artista con el que no estaba familiarizado, pero su increíble talento brilla en todas sus portadas.