[Crítica] Diario Azul, de André Juillard

Portada Diario AzulVamos a rascar un poquete por las estanterías a ver qué encontramos… ¿El Escorpión? ya está hecho… ¿7 Vidas del Gavilán? Buff, esto está demasiado valorado por la gente, habría que hacerlo con calma… ¡Espera! ¿Qué es ésto que está justo al lado de La Pluma al Viento? ¡¡¡El Diario Azul!! Mmm…

No sé cómo ni por qué me decidí a comprar en su momento este tomo en el que debutaba como autor completo el señor Andre Juillard. ¡Y menudo debut! Las páginas de este album siempre me han transmitido una sensación de tranquilidad, paz, quietud. Como si el tiempo se detuviera y transcurriese perezoso para que todas y cada una de las escenas se desarrollen perfecta y ordenadamente. Y dibujadas con un trazo limpio, elegante. Perfectamente coloreadas y planificadas. Lo cierto es que fue ésta y no la alabada 7 Vidas del Gavilán la obra que me hizo rendirme a los pies de éste caballero y animarme a adquirir ciegamente cualquier cosa que saliera de sus lápices.

A todos aquellos que les gusta etiquetar y catalogar las historias les podría decir que quizá éste Diario Azul sea un slice of life. Pero estas cosas nunca me han terminado de cuajar, así que cada uno la clasifique como más le guste…

Bueno, he contado una chorradita introductoria, otra alabando al autor y una tercera encasillado la obra. ¿Y ahora que toca?, pues contaros un poquete de qué va el asunto… Básicamente se trata de una supuesta relación amorosa que surge de la casualidad. En cada una de las partes en las que se divide el album Julliard nos relata una y otra vez el mismo intervalo de tiempo, pero desde el punto de vista de los distintos personajes que forman parte del reparto. Conforme vamos leyendo no podemos evitar cierta sonrisa al recordar un pasaje anterior y verlo ahora desde otra perspectiva al tener la visión completa de la escena. Cada una de las historias relatadas en cada capítulo se van complementando y montando poco a poco un puzzle.

Diario Azul - p14Quizá el trato narrativo de la obra nos de la impresión de ser el mismo que utilizó el señor Tantarino (sí, lo he escrito mal adrede) en su conocidísima Pulp Fiction, aunque temáticamente se parezcan tanto como un ornitorrinco y una impresora láser. De hecho, al igual que me sucedió en el film, una vez finalizada la historia es casi irrefrenable el deseo de volver a comenzar desde el principio para así tener una nueva lectura ya enriquecida por todos los matices que desconocíamos en su primera leída.

Como curiosidad, en su segunda edición en el año 2001 Norma introdujo unas cuántas páginillas más que un servidor se perdió por tener la primera edición publicada. ¡Qué rabia da que te hagan éstas cosas!

Bueno, pues resumiendo: una bonita historia de sentimientos, encuentros, amoríos y demás, que ha soportado muy bien el paso del tiempo (según mi opinión no se le notan los añetes que tiene). Para los que les guste eso de que la obra esté premiada, decir que se llevó el gran premio de Angoulême en 1995. Y también ser una buena opción de esas cuando te preguntan un tebeo para regalar a alguien que no sea lector habitual de viñetas, y más aún si el regalo va dirigido a una mujer.

Página de Diario Azul de Andre Juillard Página de Diario Azul de Andre Juillard

Portada de la edición francesa de Diario Azul de Andre JuillardDiario Azul
Guión y dibujo: André Juillard
Norma Editorial
Formato: Álbum Rústica. 80 Páginas
Precio: 12€