La verdad oculta tras Red Robin
En la grapa #180 de Robin tenemos al amigo Tim Drake durante casi todas las páginas mostrando su melenilla al viento. Os juro que es cierto. No voy a saturaros con treinta y pico viñetas en las que se aprecia ésto. Os pongo una de ejemplo y os invito a que comprobéis vosotros mismos por vuestros medios que lo que os digo es verdad.
La cuestión es que por cosas que pasan en el tebeo, y que no os contaré para no destripar más de lo necesario, el joven Drake va a parar a un almacén parecido al que llevaban a Harvey en El Caballero Oscuro, todo lleno de cosas que explotan:

Y como es normal el almacén hace THOOM. Bueno, lo normal sería BUM o PUMBA, pero los yankis tienen unas onomatopeyas muy raras:

Así que el muchacho se lanza pies para qué os quiero e intenta librarse de la explosión (ésto no nos lo enseñan, tenemos que imaginarlo y se supone que pasa entre el #180 y el #181). Pero como estamos en las fechas que estamos y el joven Robin ya había empezado a darle a los turrones y polvorones, su forma física le traiciona y se le quema la cocorota:

Y como le da palo éso de salir a apatrullar la ciudad como si fuera Harvey Dent pero cambiando el eje, se le ocurre ponerse la capucha que había encontrado en el almacén lleno de cosas que explotan (ahora es cuando le dais a la ruedecita del ratón hacia arriba para comprobar que la capucha sale en la segunda viñeta de la entrada), y entonces nace… Red Robin!!!