El cómic americano en Flechas y Pelayos
La llegada de material extranjero a España resulta constante en aquellas publicaciones barcelonesas de los año treinta. Los autores nacionales comienzan a leer las publicaciones de Lotario Vecchi en Hispano-Americana de Ediciones: Flash Gordon, Tarzán, Brick Bradford, Radio Patrol, … y la revista “Mickey“, aprendiendo su estilo y dinámica debido a la búsqueda de competencia por parte de las otras editoriales (buscan copiarlos para publicar series de contenido similar).
La Guerra Civil tronca la evolución del cómic hispano y los cómics norteamericanos (vanguardia del medio en ese momento) dejan de publicarse en España. En el bando nacional, Pelayos sigue una línea muy definida y Flecha evoluciona hacia la historieta nacional. Será en ésta, casi de manera anecdótica, donde encontremos una historieta de Walt Disney, “El Pato Donald”. Aparece en el número 72 de la revista (5 de junio de 1938), historieta muda, cerrada, sin alusiones a su origen o fecha original de publicación, que manifiesta el acceso a este tipo de material, posiblemente, proveniente de alguna publicación anterior.
Este no será un caso aislado, tras la unificación de las dos revistas y bajo la dirección de Fray Justo Pérez de Urbel, a partir del número 10 (12 de febrero de 1939), comienza a publicarse “Wong-Lo” de Brandon Walsh y dibujadas por Nicholas Afonsky. Llamada originariamente “Ming Foo”, su origen reside en la tira dominical “Little Annie Rooney” de Ed Verdier y Brandon Walsh de 1927. En los años ´30, Afonsky se incorpora a la serie aportando el protagonista achinado, una magnífica narrativa aventurera y un trabajo de arte elevado, dando un soplo de aire fresco a la publicación. Su publicación va a durar 22 números (10-18, 21, 29-39).
La otra serie que publica Flechas y Pelayos es “Popeye“. Creado por Elzie Crisler Segar el 17 de enero de 1929, comienza a publicarse en España en 1935 en el número 1 de “Aventurero”, revista de Hispano-Americana de Ediciones S.A, con el personaje perfectamente conformado así como sus secundarios Rosario (Olive), Pilón (Wimpy) y Cocoliso (Swee´Pee). Paralelamente, la editorial Molino, a partir de 1936, publica sus series en la revista “Mickey” . Con el comienzo de la Guerra Civil, y partir del número 8 comienza a publicarse la serie con el nombre de “Las tribulaciones de Popeye” que cambiará al siguiente numero al de “Popeye el marinero”. El material procede de la agencia Opera Mundi y no corresponde a Segar (muerto en agosto de 1938) sino a su seguidor en la serie Bela Zaboly, tal y como indica la primera fecha impresa -7 de noviembre-, alargándose hasta mayo de 1939 (número 64 de la revista, correspondiente al 25 de febrero de 1940).
Popeye aporta al semanario un contrapunto exótico por la diferencia de grafismo y de concepto en sus aventuras con los demonios, en la búsqueda del manantial de la juventud y en la lucha contra las arpías del mar. La publicación de la serie se realiza no respetando el formato de tira de prensa (varias viñetas que acaban en un gag a final de página) pero siendo respetuoso con la evolución de la serie. Las fechas de publicación no poseen casi vacíos –algo muy aceptable para la situación del momento-, tan sólo las tiras correspondientes a febrero del ´39.
Respecto a la traducción, un estudio comparativo con ediciones actuales revela muy pocas diferencias con el publicado en Flechas y Pelayos, algún cambio en la nomenclatura de los secundarios (Oliva –Olive-, Gontran –Wimpy-, Swee´Pee –Mimosa-) y un hecho curioso. En las tiras correspondientes a finales de noviembre de 1938 (publicadas en Flechas y Pelayos en el número 14 -12 de marzo de 1939-), Popeye se encuentra en la disyuntiva de no poder hacer frente a los demonios del subsuelo debido a que éstos le temen. Ante esto, su compañero Pilón le propone que finja ser una mujercita para parecer vulnerable y ser atacado, Popeye comienza a realizar movimientos pusilánimes y arrojar flores diciendo “soy una doncella”. Este hecho se publica de forma muy diferente en el semanario falangista debido a la afrenta que significaría para el héroe y el lector. Aquí, Popeye se mueve regalando flores sin un motivo aparente y trastocando el argumento original. Tal y como se aprecia en las imágenes siguientes, la 1ª corresponde a una edición de 1973 y la 2ª, al número correspondiente de Flechas y Pelayos.


Ésta y “Wong-Lo”” de Brandon Walsh y dibujadas por Nicholas Afonsky van a ser la únicas, de procedencia americana, publicadas por Flechas y Pelayos, el resto estarán protagonizadas en su totalidad por autores y guionistas españoles. El cómic USA quedará como material para publicaciones unitarias de finales de los cuarenta y principios de los cincuenta.