Crítica Your Name (2016), de Makoto Shinkai

‘Nos vemos en Montauk’. ‘No importa donde estés, iré a buscarte y te encontraré’.

Sobre el encuentro con una chica cien por cien perfecta una soleada mañana del mes de abril. El título de esta historia corta del escritor japonés Haruki Murakami bien podría ser el de la última película de Makoto Shinkai. ‘Me encuentro apretada contra una persona muy importante para mí, encajados a la perfección, sin ningún espacio entre nosotros. Estamos unidos de una forma que resulta difícil de comprender’. ‘Querer a alguien y ser correspondido. ¡Qué cosa tan maravillosa! Es un milagro. Un milagro de dimensiones cósmicas’

‘Solitarios dentro de las ciudades, la inclinación a encerrarse en sí mismos es tal que ya no pueden vivir sin el suplemento que les proporciona la ficción. Esos escenarios que los jóvenes japoneses actuales llevan en sus corazones son lo que Makoto Shinkai quiere reproducir. Es lo que siento cuando veo sus obras’. Estas palabras del director Shunji Iwai son extrapolables a muchas de las obras tanto de Murakami como a la historia ‘Tokio’ de David Mitchell que forma parte de su libro ‘Escritos fantasmas’ y por supuesto a ‘Your name’. La soledad, los encuentros fortuitos y la forma en la que tanto el director como los escritores plasman en sus obras el deseo y el amor hace imposible no pensar en ellos al ver ‘Your Name’, ya que esta por encima de sus claros componentes propios de la ciencia ficción, es una extraordinaria historia de amor que luchando contra los tópicos que parecen formar parte de los pilares básicos de la misma, consigue alzar el vuelo consiguiendo que el espectador se estremezca y emocione en la butaca del cine.

 

Tras 1200 años, el cometa Tiamat se aproximará a la Tierra. Durante ese periodo, Mitsuha, una estudiante de secundaria de un pequeño pueblo Itomori, y Taki que estudia en un instituto de Tokio, intercambiaran sus cuerpos. Los extraños sucesos que ocurren de dos a tres veces por semana, sin ningún tipo de control y cuando estos duermen, no solo pondrán sus vidas patas arriba si no que además creará entre ellos un vinculo especial que los conectará de una forma que nunca ninguno de los dos llegó jamás a pensar.

Shinkai muestra una extraordinaria sensibilidad a la hora de plasmar en imágenes la historia, equilibrando el humor (La manera en la que Taki descubre que se encuentra dentro del cuerpo de una chica y las constantes apariciones de la hermana pequeña de Mitsuha o la referencia a los dos únicos bares que hay en Itomora hacen imposible que al espectador no se le escape una sonrisa), la fantasía y la carga romántica de la película hacen de esta una de esas obras que no solo se disfrutan de principio a final sino que además va ganando enteros conforme avanza el metraje, dejándonos una parte final que explota como si de fuegos artificiales se tratase deslumbrando al espectador.

En el año 2004, Michel Gondry llevó a la pantalla grande un guión de Charlie Kaufman en la que es sin duda alguna su mejor película pero de nefasto título en español, el ‘The eternal sunshine of the spotless mind’ cambió a un horrible ‘Olvidate de mi’. Joel Barish despierta una mañana con la necesidad de viajar a Montauk. En el día de San Valentin, fecha inventada para vender tarjetas, este coge el primer tren hacía dicho destino. La cotidianidad de Barish se rompe de una manera tremendamente impulsiva. Su novia, Clementine Kruczynski ha borrado todo los recuerdos de su relación con este. Barish que se someterá al mismo proceso que Clementine intentará por todos lo medios guardar uno, aunque solo sea un recuerdo de ella.  Puede que al lector le sorprenda el hecho de nombrar la cinta de Gondry al hablar de ‘Your Name’ ya que Mitsuha no se somete a ningún proceso para olvidar a Taki pero Itomori no deja de ser el Montauk del segundo, la frase ‘Nos vemos en Monatuk’ posee la misma fuerza que el ‘¿Quién eres?’ y sobre todo y muy especialmente los protagonistas luchan contra el olvido, contra la forma en que se están borrando sus recuerdos del otro. ‘Alguien importante para mí. Alguien a quién no debo olvidar. ¡Alguien a quién no quería olvidar!’ La manera en la que Barrish y Taki se aferran a un recuerdo, a una sensación que no pueden justificar de ninguna manera lógica y coherente hace que ambas películas posean mas puntos en común de los que en un principio pueda parecer. Hasta los trenes y las estaciones forman parte fundamental de las historias de ambas cintas.

‘En Tokio viven y trabajan veinte millones de personas. Es tan grande que nadie sabe a ciencia cierta dónde acaba. (…) La ciudad nunca cesa de reescribirse a si misma.’ De esta manera David Mitchell describe a la ciudad de Tokio en la historia corta del mismo nombre que forma parte del recopilatorio ‘Escritos Fantasmas’. La misma fascinación que desprenden las palabras del autor inglés es extensible a la manera en la que Mitsuha percibe dicha ciudad. El deseo de esta por reencarnarse en un guapo chico de Tokio, su hastío relacionado con el pueblo en el que vive y la manera elegida por Shinkai para presentar y desarrollar a sus dos protagonistas sirve también para mostrar la dualidad entre las tradiciones y lo moderno en el Japón actual. El enfrentamiento entre la abuela de Mishua y el padre de esta por culpa de la dedicación a la política de este y la forma en la que da la espalda al santuario que ella cuida es un claro ejemplo de esto. A un nivel más superficial, la manera en la que Mishua disfruta de una cafetería de Tokio es otro de los ejemplos que pueden ilustrar esta idea.

Mitchell parece tomar parte de la esencia con la que Murakami envuelve a sus historias para desarrollar algunos de los capítulos de ‘Escritos fantasmas’. Resulta imposible no pensar que ‘Okinawa’ no deja de ser una extensión de ‘Underground’ (Novela que se puede considerar como la menos ‘Murakami’ de todas sus obras ya que esta recoge una serie de entrevistas que sirven para narrar el ataque con gas sarin en el metro de Tokio en 1995, algo parecido a lo que hizo Svetlana Alexievich en su tremendamente desgarrador ‘Voces de Chernobil’), de igual manera ‘Tokio’ podría formar parte de cualquier recopilatorio de historias cortas del autor japonés y a nadie le resultaría extraño. ‘Desde que la vi, pensaba en la chica a diario. Veinte, treinta, cuarenta veces al día. Me sorprendía pensando en ella y luego no queriendo parar como esas mañanas de invierno en que no se quiere salir de la ducha caliente’. Satoru (El jazz también está presente en la historia de Mitchell) se queda prendado gracias a un encuentro fortuito con una joven que entra en la tienda de discos donde este trabaja. El azar forma parte fundamental tanto de las historias de Mitchell y Murakami como de la de Shinaki y servirá para que la chispa de amor prenda en los protagonistas.

Otro rasgo en común entre los dos escritores y el director (También podemos referirnos a Shinaki como escritor ya que este escribió la novela de la película mientras esta se estaba todavía rodando. Según el propio director/escritor para él es difícil precisar cual fue antes, si la novela o la película debido a que ambas se complementan aunque es cierto que Shinaki se refiere a su libro como la novelización de la película) son unos personajes fuertes, capaces de seducir solo con su presencia. Puede que en el caso del escritor japonés el ejemplo mas claro sea el de May Kasahara que aparece en ‘La crónica del pájaro que da cuerda al mundo’, pero tanto Mishua  como Tomoyo (Esta última como no puede ser de otra manera con una presencia mas limitada) consiguen no solo seducir a los personajes masculinos sino también traspasar las páginas del libro o de la película y conseguir que el lector o el espectador se sientan como Toru Okada, Taki o Satoru.

‘Me irrité conmigo mismo. No existían muchas posibilidades de volver a verla’. Los encuentros fortuitos y las sensaciones por encima de los recuerdos están presentes en ‘Tokio’, ‘Sobre el encuentro con una chica cien por cien perfecta una soleada mañana del mes de abril’ o ‘Your name’. ‘Nadie puede decir que su chica perfecta al cien por cien corresponda a un tipo preconcebido. Es curioso, no recuerdo la forma de su nariz. En realidad no recuerdo si tenía o no’. Los recuerdos que vienen y van en la memoria de Taki van dando forma a la historia, (‘Todas esas cosas debían ocultar cálidos secretos, como el mecanismo de los relojes antiguos cuando el mundo aún vivía en paz’) a los encuentros y desencuentros. ‘De algo si que estoy segura. Si nos encontráramos nos daríamos cuenta’. La fuerza de muchos de los pasajes de Murakami, Mitchell y Shinkai radica en la enorme capacidad de expresar sentimientos comunes sin caer en lo ridículo o edulcorado, gracias a lo cual los lectores y espectadores son capaces de empatizar con los protagonistas.

‘Your Name’ posee un claro componente fantástico. Muchos espectadores podrán encontrar en esta parte de la película alguno de sus momentos más flojos. Puede que el recuerdo de cintas como ‘La casa del lago’ (‘The lake house’) de Alejandro Agreste y protagonizada por Keanu Reeves y Sandra Bullock pueda jugar en contra de la cinta de Shinkai pero este consigue que el espectador se olvide de este peligroso referente y que su película encuentre su propio camino. ‘Your Name’ posee un elaborado guión que juega con elementos que parecen directamente extraídos de cintas como ‘Las posibles vidas de Mr. Nobody’ (Mr. Nobody) de Jaco Van Dormael pero sin llegar a la excesiva complejidad de esta. A pesar de que las cintas de Shinkai y Dormael poseen un gran componente romántico, las pretensiones de ambos directores hacen que sus películas aún teniendo nexos en común acaben alejándose.

La banda Radwimps ha compuesto la notable banda sonora de la película que funciona perfectamente acompañando todos y cada uno de los fotogramas de la película (Tanto el director como el productor Genki Kawamure reconocen que la música de Radwimps complemente perfectamente también a la novela) La belleza de la animación rodada por Shinkai y su equipo junto con la música de Radwimps posee gran fuerza lo que consigue que muchos momentos se queden grabados en la memoria del espectador. La extrema sensibilidad que muestra el director y guionista para retratar a sus personajes y las situaciones en las que estos se ven envueltos hacen de esta una de esas cintas deliciosas que se disfrutan y mucho.

‘Your name’ es una sobresaliente cinta de animación que a pesar de su poco original premisa inicial consigue reinventarse a si misma dejándonos algunos de los momentos mas bellos vistos en el cine reciente. A pesar de que la novela de Shinkai resulta prácticamente calcada a la película, su lectura puede hacer que el espectador reconvertido a lector preste atención a algunos detalles que en un primer visionado es posible que se le pasen por alto. Tal y como reconoce el propio Shinkai, si que hay un punto importante que diferencia la narración de la novela y de la película. Mientras que en la primera solo hay dos puntos de vista, los de Mitsuha y Taki, recalcando que estos solo saben lo que ellos están viviendo y sintiendo, en la película hay múltiples puntos de vista, tanto los de otros personajes como el de la propia ‘cámara’.

‘¿Por qué no probamos si de verdad somos cien por cien perfectos el uno para el otro? Estoy seguro de que volveremos a encontrarnos y, cuando eso sucede, nos casaremos’. ‘No importa donde estés, iré a buscarte y te encontraré’.

‘Una historia triste. ¿No le parece?

‘Jamas he vuelto a sentirme tan cerca del paraíso’

‘¿Cómo te llamas?

 

Lo mejor: El epilogo final de la película. Simplemente soberbio.
Lo peor: El principio de la historia puede llevar a mas de uno a pensar que está otra vez ante la misma película que ha visto antes una y mil veces.
Título: Your Name
Año: 2016
Género: Drama – Fantasía – Romance – Animación
Duración: 106 min.
Director: Makoto Shinkai
Guión: Makoto Shinkai
Música: Radwimps
Interpretes: Ryunosuke Kamiki, Mone Kamishiraishi, Masami Nagasawa, Etsuko Ichihara, Ryo Narita, Yuri Aoi, Nobunaa Shimazaki, Kaito Ishikawa, Kano Tani
Nota: 9
Sinopsis: Tras 1200 años el cometa Tiamat se vuelve a acercar a la Tierra. Será en ese momento cuando las vidas de Mitsuha y Taki cambien por completo.