Crítica Oculus
Notable cinta de Mike Flanagan que toma elementos del cine de terror asiático tan de moda hace pocos años gracias a las películas de Hideo Nakata (“Ringu”, “Ringu 2” o “Dark Water”), Takashi Shimizu (“La maldición” – “Ju-on”), Oxide y Danny Pang (“The Eye”) o Kim Jee-woon (“Dos hermanas” – “Tale of two sisters”) hecho que llevó a que muchas de estas cintas tuvieran un remake mas o menos acertado (Podríamos citar a “Mirrors” de Alexandre Aja o “The Ring” de Gore Verbinski como muestras de buenos remakes que aunque resultan irregulares si que son muy entretenidas y tienen muchos elementos que las hacen interesantes. En el otro lado podríamos citar “Retratos del mas allá” – “Shutter” o “El grito” – “The Grudge”, curioso caso este segundo ya que fue el propio director de la original quien rodó el remake resultando este mucho mas flojo y carente de la chispa y la garra del original, algo parecido aunque salvando las distancias fue lo que ocurrió con Hideo Nakata y la segunda parte de “The Ring” que rodó en Estados Unidos y que se alejaba de “Ringu 2” resultando una película francamente decepcionante). Pero no solo la huella del cine asiático es claramente identificable en esta cinta, sin ir mas lejos hay elementos que parecen extraídos directamente de la reciente película venezolana “La casa del fin de los tiempos” y esta atmósfera enfermiza que retrata el director también es posible que nos traiga a la cabeza el “Sinister” de Scott Derrickson (Que también es publicitada con eso de: “de los productores de “Insidious”, pero en el caso de “Oculus” la caracterización de los espíritus que aunque pueda tener puntos en común con la película de James Wan se aleja de forma mas que apreciable de esta, cosa que es de agradecer y mucho) o incluso la tremendamente floja “Detrás de las paredes” (“Dream house”) del últimamente demasiado perdido Jim Sheridan. Pero sobre todo no hay que olvidarse por supuesto de “Oculus: Chapter 3 – The man with the plan” verdadero germen de esta película, cortometraje también dirigido por el propio Flanagan donde se establecen las bases de la película tomando varias escenas e ideas del mismo para que formen parte de “Oculus” y que serán claramente apreciadas muy especialmente en el monologo de la protagonista ante las cámaras de vídeo explicando el porque de su obsesión con el espejo (Aunque hay que decir que el multipremiado “Oculus: Chapter 3 – The man with the plan” esta rodado en un espacio único, una habitación, y con un solo personaje protagonista a diferencia de lo que ocurre en “Oculus” la película. Los 30 minutos de duración de este resultan excesivos ya que el monologo del casi único actor acaba cansando y no hay absolutamente nada que justifique una duración tan larga. Sorprendentemente y al contrario de lo que ocurren con la mayoría de los cortometrajes de los que se acaba realizando un largo, por ejemplo “Mama” de Andrés Muschietti, resultan excesivamente alargados demostrando que la idea solo daba para una historia de muy breve duración, en el caso de “Oculus” se tiene la sensación contraria ya que en ningún momento pensamos que la historia deriva de un corto en el que se ha basado el propio director para rodar su película)
Tras pasar varios años recluido en una institución mental, Tim se reencontrará con su hermana que le obligará a mantener la promesa que le hizo cuando eran niños: Acabar con la fuerza maligna que mató a sus padres. Flanagan igual que hizo Alejandro Hidalgo en “La casa del fin de los tiempos” se toma su tiempo para contarnos la historia y presentarnos a los personajes de forma que todo pivotará alrededor de una gran parte final donde en base a una idea desarrollada de manera muy inteligente y soberbiamente planificada que conseguirá que aquello que parecía que iba a acabar siendo otra película mas con espíritus nos deje un gran sabor de boca y sea una película realmente fácil de disfrutar. Pero Flanagan es demasiado deudor del potencial público al que va dirigida esta película y utiliza en la parte inicial de la misma ciertos recursos demasiados usados en este tipo de cine que nos hace pensar que tras “Oculus” no nos vamos a encontrar el gran trabajo de dirección y de edición que nos va a acabar mostrando Flanagan. Y es que la excelente planificación de, especialmente, la última media hora muy en la línea de “La casa del fin de los tiempos” pero con más presupuesto y por tanto con mucha más calidad técnica que esta, sorprenderá y gustará a muchos.
Sin alejarnos de ese espíritu del cine asiático que impregna a ciertos fotogramas de “Oculus”, Flanagan dota a su cinta de lo que por momentos podríamos definir como un aroma a cine clásico de terror pero llevado a un punto comercial. Ciertas escenas de esta película hacen que nos acordemos de lo que hizo Ti West con su “The Innkeepers” (Recordemos que West ya hizo su propio homenaje a lo que sería el cine de terror clásico con la notable “The House of the Devil” y aunque no se enmarca dentro de este tipo de cine, este ha rodado recientemente la magnifica “The Sacrament”, cinta que aunque pueda resultar sorprendente se puede ver lastrada por la presencia de Eli Roth como productor y su referencia a “El último exorcismo” – “The last exorcism” ya que la cinta de West tiene mas de drama que de película de terror) o incluso por momentos a “Poltergeist” junto con otros de una perversidad poco esperada para un cine como este. De todas formas no debemos perder la perspectiva de que estamos ante una cinta excesivamente comercial lo que nos lleva a pensar que hubiera sido de una película como esta si se hubiera dejado de lado lo comercial para centrarse mas en la historia, si Flanagan y Howard hubieran dejado de lado los trucos que usan en la primera parte de la película para ir desarrollando la historia con la idea de no defraudar al espectador ávido de terror.
Karen Gillan actriz que trabajó en la mítica serie “Doctor Who” de forma un tanto polémica ya que muchos padres la consideraron demasiado sexy para el papel, da vida a la protagonista de forma correcta y muy bien secundada por Brenton Thwaites. Pero el trabajo de estos actores se complementa perfectamente con el de Annalise Basso y Garrett Ryan que interpretan los roles de estos cuando eran pequeños. Aunque parezca que vamos a estar otra vez ante la típica historia que mezcla pasado y presente contando los hechos pasados para entender el presente, la forma de usar a los personajes que dan vida a Kaylie y Tim Russell o la forma de mezclar el presente y el pasado hace que los fallos de esta cinta pasen prácticamente desapercibidos y consigue que “Oculus” sea una de las grandes cintas de terror de este año, que sorprenderá a mas de uno y que obligará a todo aquel que disfrute de ella a ver la cinta de Alejandro Hidalgo “La casa del fin de los tiempos” ya que si no fuera porque ambas cintas están muy cercanas en el tiempo podríamos llegar a pensar que Flanagan ha cogido ideas de esta última (Algo parecido a lo que ocurría con “Thanatomorphose” y “Contracted” que poseen ideas arguméntales parecidas y que coincidían demasiado en el tiempo para considerar que alguna de ellas había tomado elementos de la otra, preguntado Eric England por esta similitud, el director de “Contracted” reconoce que no vio la cinta de Eric Falardeau hasta tiempo después de haber rodado su película, y es que hoy en día aunque hay artistas que consiguen sorprendernos es difícil conseguir rodar una cinta que no nos haga recordar a otras películas u otros referentes, en el caso de “Oculus” queda claro que son múltiples las películas que nos vienen a la cabeza sin que esto merme el resultado final de la misma). “Oculus” es una gran cinta de terror donde el director manejan con sabiduría los tiempos, los personajes y el montaje para hacer de esta película un autentico placer. Muy Recomendable.
Año: 2013
Género: Terror
Duración: 104 min.
Director: Mike Flanagan
Guión: Mike Flanagan y Jeff Howard
Música: The Newton Brothers
Interpretes: Karen Gillan, Brenton Thwaites, Katee Sackhoff, Rory Cochrane, Annalise Basso, Garrett Ryan, Miguel Sandoval, James Lafferty
Sinopsis: Tras salir de una institución mental donde ha pasado gran parte de su vida recluido, Tim se reencontrara con su hermana que le obligará a mantener la promesa que le hizo cuando eran pequeños para intentar acabar con la fuerza maligna que mató a sus padres.