Crítica Líbranos del Mal

libranos-mal-2 Tras el palo que recibió Scott Derrickson por su flojo e innecesario remake de “Ultimátum a la Tierra” (“The day the Earth stood still”) de Robert Wise, este decidió volver al terror, género en el que el director ya nos había dejado la muy interesante “El exorcismo de Emily Rose” (“The Exorcism of Emily Rose”) y una apreciable aunque fácil de olvidar “Hellraiser: Inferno” para rodar la notable “Sinister” una cinta que hacía suyos todos los tópicos de las películas de terror lastrada por una por momentos floja caracterización de los fantasmas pero que se beneficiaba de una impresionante banda sonora compuesta por Christopher Young y por un Ethan Hawke que resultaba perfecto en su papel de escritor con problemas con el alcohol obsesionado con volver a tener un éxito literario. “Sinister” se convirtió en una muy grata sorpresa que conseguía incomodarnos y asustarnos, donde su contenido ritmo resultaba perfecto para ir introduciendo al espectador en una atmósfera malsana que nada tenía que envidiar a la primera parte de la sobrevalorada “Insidious” pero que a diferencia de esta no se desinflaba en su parte final por culpa sobre todo de unos viajes al mas allá protagonizados por Patrick Wilson que tenían foja ambientación y unos espíritus con los que se encontraba este que no daban precisamente miedo.

Tras su decepcionante guión para la cinta de Atom Egoyan “Condenados” (“Devil’s Knot”) que no exploraba el drama de las familias ni de la comunidad donde aparecieron brutalmente asesinados tres niños como hubiera sido necesario, Derrickson vuelve a la carga con el terror con “Deliver Us from Evil” cinta demasiado deudora del tono que dio el director a su anterior cinta y que al igual que esta se toma su tiempo para ir introduciéndonos a los personajes y sus historias personales para que estos no resulten meros elementos decorativos dentro de una película de terror. (Aunque hay que decir que “Devil’s Knot” es una historia terrorífica alejada de los fenómenos paranormales que narra los terribles crímenes cometidos en West Memphis. El director sigue abonado al tema demoníaco ya que los asesinatos fueron considerados en un principio rituales satánicos y uno de los acusados y posteriormente condenado declaró en el juicio su interés por todos estos ritos) Con un malvado que parece sacado directamente de “The Purge 2: Anarchy” y con dos actores bastante solventes en los principales papeles (Eric Bana y Édgar Ramírez) Derrickson nos deja una cinta policíaca bastante entretenida con toques sobrenaturales, poseídos, casa encantadas y algún que otro exorcismo.

“Deliver us from evil” es sobre todo una especie de pseudo remake de “Seven” con poseídos. Es inevitable pensar en la obra maestra de David Fincher al ver la última cinta de Derrickson, de hecho en muchas de las escenas de la cinta este utiliza el recurso de la lluvia de una manera que recuerda a como lo hacia Fincher en su cinta y aunque no estamos ante ese uso obsesivo de “Seven” donde llovía casi constantemente si que es cierto que “Deliver us from evil” vuelve a utilizar la lluvia en ciertas escenas como recurso para crear una mayor sensación opresiva y de angustia. Pero no solo la lluvia es común a ambas películas, ciertas situaciones y escenas de “Seven” son del todo reconocibles en la cinta de Derrickson e incluso en lo que a la composición de los personajes principales se refiere. El padre Mendoza (Édgar Ramírez) esa especie de Somerset (Morgan Freeman) que muestra una cultura y un conocimiento acerca de lo que se esta investigando del todo necesaria para poder abordar ciertas partes de la investigación y Ralp Sarchie (Eric Bana) policía temperamental cuya problemática vida familiar es desarrollada en la película en profundidad lo que no ocurre con la de Mendoza o la de Somerset (Aunque no se profundiza en la vida personal del personaje interpretado por Ramírez esta si que se toca aunque sea de refilón) y al igual que ocurría con la pareja de Mills (Brad Pitt) esta considerará que se están sacrificando demasiadas cosas por culpa del trabajo de el. Pero “Deliver us from evil” no es ni mucho menos tan salvaje y brutal como “Seven”, aquí todo resulta mas comedido y aunque las dos tienen un malo bastante convincente Derrickson no consigue que este nos perturbe como lo hacía el de “Seven” (Resulta curioso y llamativo que el malo de “Deliver us from Evil” parezca sacado de “The Purge 2: Anarchy”)

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Hace unos años un análisis titulado: “Bram Stoker’s Dracula. A Study on the human mind and paranoid behavior” analizaba de manera soberbia la posibilidad de que en la famosa novela del escritor irlandés no hubiera vampiros si no que todo fuera debido a un trastorno psicótico compartido donde Van Helsing sería la fuente de dicho trastorno. Un análisis parecido a este podría servir para reflexionar acerca de los hechos que narra “Deliver us from Evil” cinta basada en hechos reales (El concepto basado o inspirado en hechos reales en muchos casos es un tema puramente publicitario ya que si se investiga un poco lo que sucedió realmente con lo que nos cuenta la película muchas veces la historia no tiene nada que ver. Uno de los ejemplos mas escandalosos es el de la muy decepcionante cinta producida por la Hammer “The Quiet ones” del director que rodó la segunda parte del remake americano de “Rec”) Un exdrogadicto que tras levantarse en una plaza empapado de vómitos y con una jeringuilla de caballo enganchada en su brazo decide tomar el buen camino y abrazar la fe cristiana ordenándose sacerdote, un temperamental policía con problemas familiares que no soporta la violencia especialmente la ejercida sobre los menores se ven envueltos en una investigación acerca de un grupo de poseídos pintores que crean una empresa para ir pintando casas por toda la ciudad. Esta historia tan llamativa estéticamente pero tan absurda argumentalmente hablando nos lleva a pensar que Sarchie también pudo ser víctima de un trastorno psicótico compartido donde la fuente en este caso no era Van Helsing si no el padre Mendoza, persona que considera el hecho de la posesión por encima de ciertos trastornos psicológicos y que tras la primera escena de la película en la que sale Eric Bana parece aprovecharse de la vulnerabilidad que muestra este que intenta ocultar con una aparente dureza para hacerle ver su propio punto de vista. El tema psicológico de la cinta y de los hechos que se muestran en ella realmente merecen un profundo análisis ya que parece más plausible estar poseído que volver de la guerra traumatizado por todo aquello que se ha podido ver y/o hacer.

“Deliver us from evil” es una cinta estéticamente muy cuidada mas cerca del cine policiaco que del terror puro y duro como podríamos esperar, sobre todo tal y como nos han vendido la película. Aunque emparejada argumentalmente con “Seven”, la cinta de Derrikson no aguanta la comparación con “El Exorcista III” (“The Exorcist III”) película dirigida por William Peter Blatty que narra la investigación de una serie de asesinatos relacionados con el satanismo y que parecen haber sido cometidos por un asesino ya fallecido. El tono con el que Blatty envuelve a su cinta mezclando el género policiaco con el terror es del todo perturbador dejándonos un par de grandes momentos difíciles de olvidar, esto se echa en falta en la cinta de Derrickson. “Deliver us from Evil” se ve bien, se pasa rápido a pesar de sus casi dos horas de duración pero no hay ningún momento de esos que crean escuela, no hay nada que haga de esta una cinta una película que vaya a marcarnos, no es una cinta que cuando lleguemos a casa y apaguemos la luz nos vaya a dar miedo lo que pueda haber debajo de la cama. “Deliver us from Evil” nos deja un exorcismo que merece desde ya un hueco en el altar de los trailers honestos ya que no solo en palabra del padre Mendoza necesitaran tiempo para hacerlo y se ponen a ello como si los protagonistas sufrieran alzheimer y se acabaran del olvidar de lo que este ha dicho si no que además el exorcismo resulta del todo decepcionante apuntalado por algunas explicaciones del padre Mendoza un tanto cansinas, innecesarias y del todo previsibles. Es difícil olvidarse del Padre Merrin y del Padre Karras y por mucho que se cuide la imagen, la fotografía y la ambientación la escena carece de la fuerza necesaria. “Deliver us from Evil” es una cinta entretenida, demasiado efectista, que tira demasiado de tópicos (Creo que seria necesario solicitar a un juez que retire la custodia a padres que regalan a sus hijos payasos metidos dentro de cajas donde hay que accionar una manivela para que este salga) y que podrá gustar y decepcionar a partes iguales ya que muchos de nosotros esperábamos mucho mas de ella. Derrickson se muestra incapaz de desarrollar elementos realmente perturbadores (esas interferencias en el walkie talkie del protagonista) de la manera deseada lo que solo sirve para que el sentimiento de decepción vaya creciendo con el tiempo.

Lo Mejor: La ambientación y el buen hacer de los dos protagonistas
Lo Peor: La sensación de estar ante un remake de “Seven”

Título: Líbranos del Mal – Deliver Us from Evil
Año: 2014
Género: Terror – Thriller
Duración: 118 min.
Director: Scott Derrickson
Guión: Scott Derrickson, Paul Harris Boardman según la novela de Ralph Sarchie y Lisa Collier Cool
Música: Christopher Young
Interpretes: Eric Bana, Édgar Ramírez, Olivia Munn, Sean Harris, Chris Coy, Joel McHale, Jenna Gavigan, Lulu Wilson, Mike Houston, Dorina Missick
Nota: 5
Sinopsis: Debido a una investigación que le sobrepasa el policía Ralph Sarchie se verá obligado a colaborar con un extraño sacerdote para dar con un grupo de personas supuestamente poseídas que están atemorizando a la ciudad.