Inception (Origen)
Como las buenas películas de intriga, Inception comienza con un misterio que hace que el espectador se cuestione lo que está viendo y pase el resto del minutaje preguntándose, junto a los personajes que la pueblan, qué demonios está pasando. El resto del film es un largo flashback que pretende explicar ese comienzo conduciéndonos por vericuetos que nos llevan a plantearnos si lo que vimos al principio era o no la realidad. La nueva película de Christopher Nolan es una historia borgiana llena de laberintos que pone en cuarentena la autenticidad del mundo en que vivimos. Un interés recurrente del director en obras tan interesantes como Memento e Insomnia. En un futuro cercano, el espionaje industrial se realiza a través de los sueños. Un equipo de ladrones se introduce en los subconscientes de sus víctimas para robarles las ideas. Contratados para hacer precisamente lo contrario, introducir en la mente una idea que parezca como propia, algo casi imposible, se enfrentarán a la misión más peligrosa que tendrán que encarar.
La excusa es lo de menos, lo que importa es ver cómo se orquesta la función y cómo el protagonista combate contra sus propios fantasmas. El plantel de actores es extraordinario hasta en los secundarios: Leonardo DiCaprio (Shutter Island), Joseph Gordon-Levitt (500 Días Juntos), Marion Cotillard (La Vie en Rose), Ellen Page (Juno), Cillian Murphy (28 Días Después), Tom Berenger (Platoon), Michael Caine (una canción de Madness), Pete Postlethwaite (Sospechosos Habituales). La trama, por su parte, resulta compleja e inteligente, sin que esto impida que cualquier espectador pueda verse reflejado en ella, pues habla de sueños y de las experiencias que todos hemos vivido durante ellos. Nos hace cuestionarnos nuestra propia existencia, si esta es la vida real o lo es cuando soñamos. A veces la línea divisoria es muy delgada. Inception es, a la vez, un espectáculo perfectamente estructurado, con excitantes escenas de acción muy bien rodadas.
Un largometraje con mucho más valor que cualquier película en cartelera ahora mismo, en donde se junta una buena historia y espectacularidad visual. Un relato que funciona a diversos niveles, tantos como sueños dentro de sueños presenta, aunque al final uno hubiera esperado un poco más de chicha y algunos tiros menos. Inception es un film engañoso que lleva a mil posibles soluciones, aunque en definitiva parece que lo que Nolan en realidad quiera es jugar con el espectador y dejarlo pensando. Uno empieza a sospechar que todo es mucho menos complicado y basta con ver la película de manera lineal. Una producción llena de trampas, pero también pavimentada de pistas para darle vueltas durante la proyección y mucho tiempo después. Favorita para el Oscar a la mejor película, ya lo verán. Sólo sería de agradecer que al menos por una vez DiCaprio cambiase de cara. Alguien debe de haberle dicho que esa barbita de gorrino disimula los mofletes. Malditos embusteros.
A manera promocional, Warner Bros ha hecho público un cómic on line que supone, como llaman los modernos, una precuela a la película Inception. Con el nombre de The Cobol Job presenta a los personajes principales de la historia y relata los hechos que explican cómo y porqué DiCaprio y su equipo llegan a esa primera y espectacular secuencia de la película. Si lo leen antes de acudir a sus salas de cine, tal vez se sientan menos mareados al presenciar los primeros diez minutos de proyección sin saber a qué viene todo, pero The Cobol Job ni añade nada nuevo a la historia ni tiene mérito como cómic. Una curiosidad que le hace un flaco favor al guión de Nolan, dibujada por principiantes chapuceros.