Crítica Elysium (2013)
Piensa por un segundo, incansable lector. Te conozca o no, seas habitual o no… seamos amigos o sea la primera vez que leas un texto escrito por mi. Da igual. Piensa que eres pobre. Piensa eso… aunque ganes 150.000 euros al año. Eres pobre. P·O·B·R·E ¿¿Está claro??? Eres un pobre desgraciado. No eres Bill Gates, no eres la Reina de Inglaterra, no eres Emilio Botín… y tu familia desde luego no viene de siglos de alta cuna o burguesía extrema.
Eres tan mortal, prescindible, desconocido… para entendernos: eres tan poca cosa como yo. Eres ganado. Las grandes empresas (de comida, farmacéuticas, bancarias, armamentísticas…) te utilizan como ratas de laboratorio. Prueban si esto es tóxico o no, si soportas esto o otro o no. Solo sirves para hacer más rico a los otros. A los de arriba. A los intocables. Esos a los cuales tu (si, tu… listillo) nunca pertenecerás.
Si mueres… tu vida importará a muy pocas personas, y tu incidencia en el transcurso de la Humanidad… habrá mínima, o nula. No eres famoso (no lo serás…), no eres una autoridad en nada (y no lo serás…), no eres un político ni un empresario con miles de millones de euros (ni lo serás…). Eres como yo. Un ser humano (por favor, no digáis nunca “persona humana”. Está mal. Es feo. Suena mal. Duele solo pensarlo) del montón. Si fueras un perro… serías un chucho.
Acepta lo que eres… porque ni en un millón de vidas podrías vivir en Elysium.
Según la Wikipedia, esa web que consultamos todos los mortales y los de arriba (por eso Internet es el medio más democrático de todos… aquí somos iguales tu y yo, lector poderoso. Quieres controlar este mundo, pero sabes que no puedes… somos Legión) para sentirnos más listos, para aseverar que tenemos la razón absoluta y la prueba final de todo, los Campos Elíseos eran un lugar mitológico y sagrado donde las sombras de los hombres virtuosos y los guerreros heroicos llevaban una existencia dichosa y feliz, en medio de paisajes verdes y floridos.
El cineasta sudafricano Neill Blomkamp debutó como director en el largometraje con la película Distrito 9, una cinta de ciencia ficción producida por (nada más y nada menos que) Peter Jackson que terminó siendo un éxito sorpresa en la taquilla y fue nominada a la mejor película en los Oscar de 2010. Bolmkamp venía de ser un joven autodidacta que había trabajado haciendo F/X por ordenador en series de TV como Stargate SG-1, había dirigido pequeños cortometrajes… y debido a su gran talento, se había hecho conocido en Internet por sus videos sobre la saga Halo de Bungie para la Xbox y la Xbox 360.
De hecho, fue una triste tragedia (y una falsa promesa) lo que le llevó a Blomkamp el poder dirigir Distrito 9. El joven sudafricano iba a dirigir un largometraje basado en Halo que produciría Peter Jackson. El proyecto quedó cancelado, pero Jackson no quiso desaprovechar el talento de Neill Blomkamp.
El resto es historia.
Cuatro años ha tardado Blomkamp en sacar adelante su siguiente película. Y es que parece que el director sudafricano se ha pensado muy bien cual sería su siguiente largometraje: Elysium. De nuevo la película se mueve en el género de la ciencia ficción, se mueve en terrenos conocidos para el director (modificación corporal extrema, bajos fondos, racismo….) para narrar una fábula, que si bien cae en ocasiones en lo fácil (incluso pueril) generalmente funciona a las mil maravillas para el espectador.
Y es que la teoría de Robin Hood siempre funciona.
Elysium es una película de ciencia ficción protagonizada por Matt Damon, Jodie Foster, Alice Braga, Diego Luna y Sharlto Copley (no por casualidad el protagonista de Distrito 9) en la que se nos cuenta como a mediados del siglo XXII los ricos viven en una gigantesca estación espacial que orbita la Tierra llamada Elysium donde no hay hambre, ni guerras ni pobreza… un Paraiso en toda regla para unos pocos. El resto de la humanidad vive hacinada en la Tierra, un mundo sobre poblado y sobre explotado repleto de miseria, hambre, paro… desigualdades brutales (más o menos como hoy en día, esta parte no es ciencia ficción, no).
De vez en cuando, algunos hombres y mujeres desesperados son capaces de robar una lanzadera espacial y piratear el sistema de Elysium para llegar hasta allí y llevar a los enfermos a las cápsulas que tienen ahí arriba los ricos, que lo curan todo. Casi siempre, estos asaltos acaban en tragedia gracias a la intervención de la Ministra de Defensa de Elysium Jessica Delacourt (Foster).
Max DaCosta (Damon) es un antiguo ladrón de coches en libertad provisional que trabaja en una fábrica haciendo robots policías… Max sufre un accidente nuclear que lo matará en 5 días si no sube a Elysium a curarse en una de esas cápsulas que tienen ahí los ricos. Todo ello desencadenará en una serie de acontecimientos que pueden suponer el fin de la hegemonía de unos pocos sobre la mayoría.
Con un presupuesto de entre 90 y 115 millones de dólares (calderilla si se compara con las grandes superproducciones de este verano como El Hombre de Acero, Star Trek En la Oscuridad o Guerra Mundial Z que han costado de entre 190 y 230 millones) la cinta se mueve entre el cine de denuncia social (al más puro estilo Distrito 9), el cine de ciencia ficción más duro y el cine de acción más comercial. Cada dólar invertido se ve en pantalla. Los F/X están detallados al milímetro…. desde las imágenes vistas en el espacio, al diseño de las armas de fuego (ese AK-47 modificado) y las lanzaderas espaciales a modo de pateras atestadas de ilegales, el CGI, las prótesis… todo funciona en la película.
Como espectadores podéis elegir. Elysium se puede ver como un entretenimiento veraniego de acción y efectos especiales… pero también se puede ver como una cinta de ciencia ficción que refleja de forma exagerada nuestro actual presente.
Mencionar a parte la (espectacular) interpretación y caracterización de Sharlto Copley como el malvado Kruger.
Lo peor: Quizás la media hora final de película no está a la altura del resto.
En resumen, una película de ciencia ficción repleta de acción, con unos efectos especiales que quitan el hipo, un reparto de lujo y una trama “tristemente” demasiado real en la que dejan bien claro al espectador de la película a que mundo pertenece.
La puesta en escena es magnífica (limpia, eficaz y espectacular a partes iguales), y pone de manifiesto que Neill Blomkamp es uno de los jóvenes cineastas a tener en cuenta para futuras películas de primera categoría. Quizás, por destacar algo realmente negativo en la película (y tiene un punto negativo muy fuerte) es el final. Ojo… no me malinterpretéis. No es un mal final. Simplemente es un final no tan imaginativo como el resto de la película. Quizás por eso (y solo por eso) no puedo darle la nota más alta a la película.
Aún así, Elysium es una de las películas del verano, una de las películas del año, y una película REALMENTE RECOMENDABLE, entretenida, espectacular y tristemente (una fantasía) demasiado real.
Y tu… ese lector poderoso (ahora me dirijo a ti), ese lector de arriba (siempre hay uno, y eres tu el que está leyendo esto… yo también noto como una gota de sudor frío te recorre la espalda) debes estar alerta. Nosotros (los perros callejeros, los que servimos de carnaza en las guerras… con los que prueban los bancos para ser más ricos, la mierda de abajo) somos más. Y un día despertaremos. Un día dejaremos de tener miedo. Y ese día… ese día será tu final. Y tus perros de presa no podrán hacer nada. Aquí, en Internet, estamos despertando. Y lo sabes. Por eso lo quieres. Por eso quieres nuestro mundo… por eso quieres esas leyes bastardas y mentirosas. Pero no podrás. No puedes… no.
Autor: Raúl Cifuentes
> Imágenes de Elysium.
> Trailers y clips de vídeo de Elysium.

Año: 2013
Duración: 109 min.
País: Estados Unidos
Director: Neill Blomkamp
Guión: Neill Blomkamp
Música: Ryan Amon
Fotografía: Trent Opaloch
Reparto: Matt Damon, Jodie Foster, William Fichtner, Alice Braga, Sharlto Copley, Diego Luna, Wagner Moura, Talisa Soto, Ona Grauer, Terry Chen, Adrian Holmes
Productora: Columbia Pictures / Media Rights Capital / QED International / Sony Pictures Entertainment (SPE)